La producción masiva a nivel mundial de botellas y recipientes es posible hoy en día gracias a la existencia de la conocida máquina de moldeo por soplado (blow molding machine). Este es un proceso de elaboración en varias etapas que puede realizarse en modo continuo o discontinuo. El producto es una pieza hueca de paredes finas fabricadas con materiales termoplásticos.
Existen dos modos principales de soplado, estos son inyección y extrusión. En ambos procesos:
- El polímero o materia prima se coloca en un cilindro a alta temperatura.
- Se emplea el husillo para mezclar.
- Se inyecta o extrusiona para darle forma a una pieza tubular denominada preforma.
- La preforma se posiciona en el molde y se le introduce aire a alta presión hasta que la superficie del plástico alcanza la pared.
- Se enfría el plástico y cuando se endurece, se abre la sección y se expulsa el recipiente ya listo.
Problemas comunes en el moldeo por soplado
Los procesadores a diario se enfrentan a diferentes dificultades para elaborar recipientes perfectos. Entre ellas:
- Espesor de la pared no homogéneo: la auto-nivelación del material ayuda a obtener diferencias de apenas 1 milésima de pulgada; pero, dicho fenómeno pierde efecto al ocurrir una desviación del punto de inyección. Esto puede ser causado porque la barra de estiramiento no sostiene la preforma adecuadamente, la presión del aire de pre-soplado es muy elevada o se aplica antes de tiempo, etc.
- Brillo perlado y opacidad: aunque son fallas de naturaleza opuesta, ambos conllevan a un blanqueamiento del envase. La primera se produce dentro de la botella por un exceso de tensión que rompe la microestructura. La segunda ocurre en el exterior si hay sobrecalentamiento en las etapas de inyección o de soplado. Las dos se resuelven con un mejor control de la temperatura y la ventilación.
- Insuficiente fuerza de carga superior: este factor que depende principalmente del espesor de pared y del diseño, mide la capacidad de las botellas de tolerar el peso de las filas que se le colocan por encima; en la mayoría de los casos la resistencia es mayor si están llenas. Se utiliza para reforzar las partes más débiles, añadiendo material adicional.